martes, 25 de marzo de 2014

El dueño de Ray-Ban diseñará y venderá las Google Glass

Quién dijo que la tecnología estaba reñida con la moda? La italiana Luxottica, líder en el mundo de la óptica y propietaria de marcas tan populares como Ray-Ban u Oakley, ha llegado a un acuerdo para diseñar, desarrollar y distribuir las nuevas Google Glass, según ha anunciado la empresa en un comunicado.

El acuerdo supone abrir a un mercado más amplio las gafas interactivas del gigante de Mountain View, así como invita a pensar en que el dispositivo tendrá un diseño menos arcaico y ortopédico que los prototipos conocidos hasta la fecha.

La alianza supone la unión de dos líderes en sus respectivos mercados y concluye un periodo de 10 meses de contactos preliminares. Precisamente, hace unas semanas que Google anunciaba que pondría a la venta junto a sus gafas interactivas cristales graduados, lo que entra de lleno en el terreno de la firma italiana.

Para Luxottica, que lleva 20 años como número uno de ventas, supone también una baza clave para garantizarse que seguirá al frente del sector durante otros 20 años. "Con esta relación estratégica, Luxottica y Google, que están marcando el ritmo de sus respectivos sectores, unirán los desarrolladores de alta tecnología con los diseñadores de moda y los profesionales de gafas", ha destacado Andrea Guerra, consejero delegado de Luxottica, empresa que cotiza en Milán y Wall Street. El acuerdo, ha añadido, "es la plataforma ideal para el desarrollo de la industria y responder a las necesidades cambiantes de nuestros clientes a escala mundial", ha añadido.

La clave de las Google Glass es que incorporan una pequeña pantalla del tamaño de un sello en la lente que permite grabar vídeo, hacer fotografías, acceder al correo electrónico o consultar información en internet gracias en conexión con el móvil.


El fabricante italiano no ha dado detalles sobre las condiciones financieras del acuerdo, aunque sí ha avanzado que espera poder empezar a comercializarlas en 2015. Así, ha asegurado que pondrá su amplia red de puntos ve venta a disposición de Google, algo muy preciado por la dirección de Mountain View. "Luxottica sabe cómo construir, distribuir y vender productos geniales que los clientes quieren", ha asegurado Guerra.
El ejecutivo también ha garantizado que incorporará la nueva tecnología a sus principales marcas empezando por Ray Ban y Oakley. A este respecto, Oakley, muy popular entre los deportistas, se ha destacado en los últimos años por apostar con fuerza por la tecnología. Fruto de ello, ha llegado a poner a la venta unas gafas con música y auriculares —que no tuvieron mucho éxito, por cierto— y ha desarrollado unas pantallas para esquí con dispositivo GPS e instrumentos de navegación.
Las Google Glass, que actualmente solo son un prototipo, tienen un precio prohibitivo de 1.500 (1.088 euros) o 1.725 dólares (1.250 euros) con lentes graduadas y no están disponibles para el público en general. Para llegar a un producto más accesible, "las dos compañías formarán un equipo de expertos dedicada al diseño, desarrollo de productos e ingeniería vinculada a las lentes".

Su objetivo, ha continuado Guerra es "combinar la moda y el estilo de vida actual con la innovación tecnológica", un reto extensible a todo el elenco de complementos portables que no han sabido solucionar los grandes fabricantes con sus relojes.
Las gafas de Google, de hecho, no solo han recibido críticas por supuestamente poner en riesgo la privacidad de las personas o ser un elemento de evasión de la realidad. También su diseño ha sido objeto del reproche con sus monturas al aire pasadas de moda y la visibilidad del dispositivo que incorporan en el frontal.
Conscientes de ello, la compañía estadounidense presentó en enero la colección Titanio, más acorde con las líneas redondas y con monturas de pasta que dominan actualmente el sector.
En la Bolsa, el anuncio del acuerdo ha sido recibido con una importante subida cercana al 4% de la Luxottica, que en 2013 obtuvo unas ventas de 7.312 millones de euros. Google, por su parte, se ha dejado un 0,18%. Sus ingresos de 2013 se elevaron a 44.138 millones de euros.

sábado, 1 de marzo de 2014

El nuevo Galaxy S5 de Samsung, con sensor de huella digital y resistente al agua

  • Es un nuevo teléfono de gama alta, caracterizado por su rapidez
  • Saldrá a la venta en 150 países el próximo 11 de abril
  • Samsung también ha sorprendido con una pulsera inteligente, Gear Fit 
La multinacional surcoreana Samsung ha reservado para su puesta de largo, con la última presentación de la primera jornada del Mobile World Congress, su último teléfono inteligente. Se trata del Galaxy S5, caracterizado por tener un sensor de huella digital y ser resistente al agua y al polvo.
Con un diseño similar al de su antecesor, el Galaxy S5 mejora algunas de sus características. Así incorpora un sensor de ritmo cardiaco, una cámara principal de 16 megapíxeles -la fronta tiene 2 MP- y capacidad para grabar vídeo en calidad HDR.

El nuevo móvil se lanzará al mercado en 150 países el próximo 11 de abril, según recoge EFE.

Más rapidez y pago con huella dactilar

El Galaxy S5 es un dispositivo con sistema operativo Android con una conectividad más rápida en 4G LTE y Wifi y una cámara HDR con autofocus con una velocidad de hasta 0,3 segundos.

La pantalla es de 5,1 pulgadas Super AMOLED (1920 x 1080) con posibilidad de adaptar el color, tono y el contraste. Su batería, de 2800 miliamperios, permite 21 horas de conversación y una autonomía de hasta 390 horas en espera. Sus dimensiones son de 142 x 72,5 x 8,1 milímetros y tiene un peso de 145 gramos.



Entre las funciones llamativas del Samsung Galaxy S5 está que permite el pago con móvil utilizando como contraseña la huella dactilar -uno de sus competidores, el iPhone 5S ya incorporaba la característica de desbloqueo con huella-. Asimismo, que el software de su cámara que soluciona los problemas de desenfoque de las fotografías.

El encuentro de presentación de Samsung en el Centro de Convenciones ha sido multitudinario, con más de 4.000 asistentes.

Nueva pulsera inteligente

Si en verano Samsung presentó su primer reloj inteligente, el Galaxy Gear, la compañía surcoreana ha acudido al MWC con dos nuevas propuestas, una pulsera inteligente, bautizada como Gear Fit y el reloj Gear 2, ambos resistentes al agua y al polvo, como el Galaxy S5.

La pulsera incorpora una pantalla de 1,84 pulgadas curvada Super AMOLED con una resolución de 432x128 píxeles, según recoge Europa Press.


Esta tecnología de Samsung para llevar en la muñeca tiene unas dimensiones de 23,4 x 57,4 x 11,95 milímetros y solo pesa 27 gramos. El dispositivo incorpora una batería de 210 mAh, que da autonomía para tres o cuatro días, aunque puede llegar a cinco si se usa de forma moderada.
La pulsera está especialmente diseñada para el deporte e incorpora un podómetro, un monitor de ejercicio, un medidor de pulsaciones, monitor de sueño y, por supuesto, cronómetro y cuenta atrás. También podrá recibir las notificaciones del smartphone, al que se conecta vía Bluetooth 4.0.
La pulsera también incorpora un acelerómetro y un giroscopio, y las correas son intercambiables. Gear Fit estará disponible a nivel mundial a partir del próximo mes de marzo, aunque aún se desconoce el precio de lanzamiento